Luego de ver lo que el ajo puede hacer te sorprenderás, porque más allá de su uso en la cocina, tienen una serie de propiedades que pueden mejorar significativamente nuestra calidad de vida.
El ajo es una planta cultivada desde hace más de 7.000 años por la medicina natural debido a sus extraordinarias propiedades curativas.
Cuando el ajo se encuentra en su proceso de germinación, produce múltiples sustancias químicas, entre ellas las fitoalexinas, que utiliza para protegerse de insectos, virus, bacterias y plagas. Estas fitoalexinas son tóxicas para los microorganismos e insectos, pero resultan muy beneficiosas para la salud de las personas.
Muchas personas hoy en día colocan un diente de ajo bajo sus almohadas cada noche o bajo la cama. No pienses en el olor por un segundo, ¡piensa en sus propiedades terapéuticas!
- Te ayudará a dormir mejor. La alta concentración de zinc del ajo te ayudará a relajar todos tus músculos durante el sueño.
- El ajo tiene propiedades antibióticas, expectorantes, depurativas y desinfectantes.
- El ajo ayuda a evitar la gripe, el resfriado y la tos.
- El ajo también es utilizado por algunas personas para la prevención del cáncer.
Otras propiedades curativas del ajo
- Actúa contra virus y bacterias intestinales.
- Reduce los niveles del colesterol LDL.
- Ayuda a prevenir el cáncer.
- Protege el sistema cardiovascular y ayuda a reducir la presión arterial.
- Previene las úlceras de estómago.
- Regula los niveles de azúcar en sangre.
- Aumenta la actividad del sistema inmunológico.
- Purifica la sangre.
- Previene y retarda la oxidación de las moléculas.
- Previene la arteriosclerosis.
- Tiene un efecto antibiótico.
- Contiene gran cantidad de vitaminas (B1, B2, B6, B12, ácido fólico, E, C y A) y minerales (hierro, calcio, zinc, magnesio, etc).