La tiroides es una glándula ubicada en el cuello. Es una glándula endocrina que produce hormonas y éstas son las que controlan el ritmo de muchas funciones del cuerpo.Incluyendo la quema de calorías y los latidos del corazón.
Cuando estamos mal de ésta glándula suelen ser problemas de peso y a continuación te daremos algunas señales que podrían indicar que tu tiroides no está trabajando correctamente.
Tu estado anímico va de la tristeza a la depresión.
Una alteración en la glándula afecta tu estado anímico, ya que una producción menor de la tiroides alterará tus niveles de serotonina en el cerebro la cual es una sustancia que está presente en las neuronas y realiza funciones de neurotransmisor y al tener niveles irregulares de ésta te hará sentir más triste de los normal e incluso depresiva.
Estreñimiento.
Es uno de los síntomas más comunes.
Problemas de sueño.
Al levantarte o a dormir demasiado. Cuando existe la tiroides inactiva hará que tus funciones corporales sean mucho más lentas.
Piel seca y pérdida de cabello.
La tiroides puede provocar que tu piel se vuelva más seca de lo normal e incluso podría provocarte una gran pérdida de cabello.
Aumento de peso repentino.
Es un síntoma común con los problemas de la tiroides. Tu metabolismo no trabaja correctamente.
Malestar o dolor en la garganta.
Sentirás dolor pues la tiroides se encuentra ahí. Y van desde dolores a cambio de voz.
Dolor o adormecimiento en algunas extremidades o partes del cuerpo.
Si sientes dolor cuando realizas algunas actividades diarias o movimientos y además, éste dura por días significa que algo está mal con tu tiroides. Lo mismo pasa con el adormecimiento de algunas partes del cuerpo.
Tu corazón se agita demasiado.
Todo se debe a que tu corazón se "llena" de muchas hormonas tiroides que saturan tu sistema.
Confusión
La producción excesiva de tiroides puede provocar que te cueste más concentrarte y a la vez provocará confusión.
Presión sanguínea alta.
El hipotiroidismo puede provocar niveles altos de ese colesterol y ésto, como consecuencia te provocará problemas cardíacos.
Aumento de apetito o confusión en los sabores.
El producir muchas tiroides provocaría el aumento del apetito.Y el tener una producción escasa provocaría una mala percepción en los sabores y olores. Estos síntomas son tan solo algunos que indican que tu tiroides anda mal. Si presentas alguno o todos los síntomas acude al médico. Es algo que puede ser controlado mediante medicamentos.
