La belleza de Marilyn Monroe fue y sigue siendo legendaria. Esta mujer sorprendió a todos a mediados del siglo XX con su belleza, espontaneidad, talento, estilo al vestir y seguridad. El impacto que tuvo fue tal que se convirtió en un canon de belleza que aun en la actualidad permanece. Monroe es hasta el día de hoy un símbolo de la cultura pop, de belleza y de Hollywood.
Marilyn Monroe despertó atracción en muchos y una gran cantidad de mujeres se preguntan cuál era el secreto de la belleza de esta modelo estadounidense. Pues, recientemente, el Museo del Maquillaje de New York ha develado la rutina facial que usaba Marilyn para cuidar de su rostro.
Los cuidados del cutis de Marilyn Monroe
Contrario a lo que se podría pensar, Marilyn no tenía una piel perfecta. Sin embargo, seguía de manera rigurosa las recomendaciones de su especialista, Erno Laszlo. Se ha hecho público un documento de 1959 donde el dermatólogo le redactó todas las especificaciones del tratamiento que debía cumplir para contrarrestar el cutis seco, que le provocaba descamaciones y rojeces.
El tratamiento de Marilyn Monroe consistía en lo siguiente:
Al despertar, debía lavar su cara y cuello con un jabón especial para su cutis, con agua tibia; seguidamente, requería de aplicación de tónico en la misma área. Finalmente aplicaba polvos especiales.
Antes de ir a dormir, debía retirar todo el maquillaje con aceites y leche limpiadora. Luego, tenía que aplicar una crema extra hidratante en el rostro y dejarla actuar toda la noche.
Otros hábitos para favorecer la belleza
Marilyn no dejaba nada al azar, cuando se trataba de su carrera, y parte importante de su carrera era su aspecto. Por ello, dedicaba mucho tiempo y esfuerzo a su físico. Así, estos son algunos de los hábitos de la actriz a los que se le atribuye su excepcional belleza.
A pesar de que no cumplía con un régimen de ejercicios demasiado estricto, sí realizaba una pequeña rutina diariamente. Por las mañanas, se recostaba en el suelo y levantaba pesas de 15 libras para fortalecer los músculos del pecho. Hacía una serie de 15 repeticiones.
En cuanto a su alimentación, era bien conocido que desayunaba con un vaso de leche caliente con dos huevos crudos en su interior y le agregaba multivitamínicos. De cena, comía una porción de proteína, que podía ser hígado, cordero o filete, acompañada con zanahoria.
El maquillaje que utilizaba Marilyn era muy característico. Para sus labios, usaba cinco tonalidades de rojo para darle el color característico que se le conoce. En sus ojos, usaba pestañas postizas a la mitad y delineado negro y blanco en sus párpados.
Cuidaba siempre su piel de los rayos solares, por lo que no salía sin primero aplicar un bloqueador de UV. Además, Dormía hasta 10 horas si sus ocupaciones se lo permitían y no utilizaba pijama.
Está claro que esta mujer se esforzaba por mantener su aspecto. Lo que demuestra lo mucho que vale mantener una vida sana y tener los cuidados necesarios con nuestro cuerpo.