Lo conocemos, lo bailamos, lo cantamos. Hace más de diez años que es parte de una moda que nunca se detuvo. Si bien muchos pensaron que sería un género sin futuro, se equivocaron ya que músicos como J Balvin, Ozuna y Maluma lideran cualquier ranking de popularidad.
En vista a este imparable fenómeno, el gobierno de Cuba decidió tomar cartas en el asunto. Mediante la emisión del Decreto 349/2018 busca regular las actividades culturales en la isla. Dentro de los lineamientos que contempla, establece el veto a piezas con “lenguaje sexista, vulgar, discriminatorio y obsceno”. Esto es, claramente, un llamado directo para el reggaeton ya que este género es fácilmente etiquetado con alguno de esos términos.
Sobre las medidas que la norma prevé para hacer cumplir tal disposición, incluyen: descalificación profesional de quienes no respeten esos parámetros en sus puestas en escena o, la imposición de duras sanciones a quienes desde las instituciones permitan esas prácticas.
Por supuesto, como era de esperarse, distintos sectores han criticado con fuerza esa disposición legal. Algunos se refieren a ella como el “decreto mordaza” para los artistas locales. Además, se alude a la libertad de expresión artística y se denuncia que estamos ante una legislación poco clara que puede permitir excesos por parte de las autoridades.
Según reporta El Espectador, no se trata de una normativa muy popular en estos momentos.
En esta línea, una nueva Constitución Nacional será sometida a un referendo el próximo 24 de febrero en dicho país. De forma paradójica, en su texto, la creación artística se califica como “libre”.