¿Existe algún pequeño en el mundo que no conozca la popular serie de dibujos animados, Peppa Pig? Bueno, sin duda los habrá, pero podemos asegurar que no es lo más común.
Esto se debe a que, la ultra conocida serie británica Peppa Pig ha sido traducida en múltiples idiomas y hoy en día se emite en más de 180 países.
En principio, la historia trata sobre una familia de cerdos, en la que los distintos personajes pretenden servir de ejemplo para las niñas y niños, a través de los valores que exponen estos animalitos. Sin embargo, en la práctica, las cosas no salieron según lo planeado.
Estos son cuatro motivos por los que Peppa Pig no es el mejor ejemplo para los niños.
1. Peppa se burla de Papá Pig por su peso
No hay ninguna justificación para burlarse de una persona por tener sobrepeso, y esto es algo que se debe inculcar en los niños cuanto antes. Sin embargo, la pequeña Peppa con frecuencia se burla de su padre, Papá Pig, por su sobrepeso.
En un episodio en particular, Peppa y su madre se encontraban jugando en la casa del árbol, pero cuando Papá Pig trata de unirse a la diversión, su redonda figura le evita pasar por la puerta, y tanto Peppa como su madre se ríen a carcajadas del infortunio de Papá Pig.
Peppa hace comentarios como "¿Qué dices, papi? Tienes la barriga un poco gordita" o "la barrigota de papá". Para nada un buen ejemplo a seguir.
2. Refuerza los estereotipos de género
En un episodio, Peppa y sus amigas se encontraban jugando en la casa del árbol. Pero cuando el pequeño George trató de entrar, le impidieron el paso por concepto de su género, dejando en claro que “los chicos y las chicas no pueden compartir juegos”.
En otro capítulo, la camiseta de fútbol de Papá Pig se destiñe y queda -accidentalmente- de color rosa. Inmediatamente, Peppa asume que es un vestido de su madre. Al enterarse de la verdad, confiesa sin vueltas que "el rosado no es un buen color para un camiseta de fútbol".
3. Presenta a los hombres como inútiles
Papá Pig es el saco de boxear de todos los personajes de la serie. Capítulo tras capítulo, lo presentan como alguien inútil que, con frecuencia, fracasa en las actividades que trata de realizar. "Qué tonto, papi" es una de las frases más usuales de la pequeña Peppa.
Por el contrario, Mamá Pig es súper activa y suele tener éxito en todo lo que intenta. Estos comportamientos también forman estereotipos, y justamente esto es lo que debemos evitar.
4. La cerdita promueve comportamientos cuestionables
Peppa tiene una actitud bastante rebelde frente a los retos de sus padres. Y claro que no es difícil imaginar cómo los niños querrán imitar el comportamiento de su serie favorita. Asimismo, el pequeño George Pig tiene la costumbre de decir "yuck" cuando su mamá cocina vegetales, y sólo quiere desayunar torta de chocolate.
Con esto no estamos diciendo que no se utilicen recursos para empatizar con los niños, sino que estas escenas refuerzan conductas que no son buenas para ellos.
Según el psicólogo Arig Sigman, es "totalmente ingenuo" que los padres crean que la televisión no tendría efecto en el comportamiento de sus hijos e hijas. Justamente, la facultad que tienen los niños es ser impresionables y esto generará el deseo de imitar el comportamiento de sus ídolos.
Claro que, no necesariamente hay que prohibir por completo su emisión en casa, pero sí encender antenas y, ante alguna escena o situación que nos haga ruido, poder dedicarle el tiempo a una buena charla con los más pequeños, como también facilitarles otro tipo de programación.
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