Puede que ahora te estés preguntando por qué no estás siendo tan feliz como deberías. La respuesta puede ocultarse en en alguno de los tres hábitos que te nombraremos a continuación.
Permites que los pensamientos negativos se apoderen de tu mente
Te diré algo personal con lo que todavía lucho día tras día. Y es que al igual que todo ser humano, yo he lidiado con muchos altibajos, pero también he tenido grandes momentos. Me atrevería a decir que tuve una gran infancia y muchas cosas buenas, pero entre esos grandes instantes, me he cruzado con malas personas que han querido dañarme y muchas de ellas lo han logrado. Pero el tiempo pasó, y hoy día soy una persona que tiene muchas razones para sentirse feliz. Sin embargo, constantemente, a mi mente vienen muchos recuerdos de los momentos malos de mi vida, y muchas veces pienso y creo recuerdos de cosas que no me han pasado y que solo me hacen sentir mal.
Es curioso como a veces nosotros mismos nos atormentamos con cosas que no nos están pasando o cosa que ya sucedieron. Hay quienes están enfermos de una bronquitis y andan pensando en una neumonía, otros sufren de algún otro dolor y se imagina un cáncer. La realidad es que nosotros podemos ser tan felices como queramos pues la felicidad está en nuestro interior, pero si le damos tanta cabida a los malos y negativos pensamiento, ¿en qué momento seremos felices?
Centras tu atención en las cosas malas de tu día, en lugar de las buenas
Este punto se compara mucho con el anterior. Como te dije hace un momento, todos en nuestra vida pasamos por buenos y malos momento, pero nadie se detiene a pensar que el número de días malo es muy más inferior que el número de días buenos. Piensa por un instante esas veces que te da gripe. Llevas un año invicto, no enfermas de nada pero de pronto te dio esta virosis y tuviste que estar en cama de tres a cinco días. Ahora, ¿qué son cinco días en cama para 300 días fuera de ella? Nada, pero tenemos la habilidad para exagerar lo malo hasta el punto de olvidar lo bueno.
El mejor consejo que me doy en este día y que te doy a ti, es el de intentar pensar en cosas buenas cuando nos pasen cosas malas. Consideremos todo lo bueno que hay a nuestro alrededor. Si hacemos esto, veremos como la balanza se inclinará a nuestro favor la mayoría de las veces o quizás todas las veces.
Creer que no eres digno de la verdadera felicidad
La verdadera felicidad está dentro de ti y en tus creencias. Si no crees que eres capaz de ser feliz, ¿cómo esperas serlo? Necesitas creer y vivir lo que realmente quieres sin importar lo que se te atraviese en tu camino. Debes comprender que eres una buena persona, que intentas hacer lo mejor que puedes, eres sincero, amable, educado, cuidadoso, no le haces mal a nadie en ningún sentido, en fin, mereces estar en paz y tranquilo. Pero sin duda debes creerlo y aceptarlo para poder vivirlo.