Nuestra memoria y todo el laberinto enigmático que la rodea: recordamos nombres de personas que hemos visto una sola vez en la vida y a veces, ante una amiga o familiar le decimos tres apodos antes del que le corresponde. Así de misteriosa y rebuscada.
Entre los hallazgos más sorprendentes que se relacionan con la neurociencia contemporánea, uno de los más increíbles indica que nuestros recuerdos no se crean y se almacenan una sola vez. Claro que no, nuestro cerebro tiene la capacidad de “rehacer" una nueva versión de aquello que recordamos en el momento que nuestra memoria lo necesite. Sí, así de loco es todo.
Pero aún no termina. Pocas semanas atrás, un estudio publicado en la revista especializada The Journal of Prevention of Alzheimer's Disease afirmó información sobre el vínculo estrecho que existe entre la música y los recuerdos. En este punto, aseguran que hasta en etapas avanzadas de dicha enfermedad conocida por "matar recuerdos", los pacientes identifican las canciones que escucharon en etapas previas de su vida.
En este contexto, se re-analizaron investigaciones vinculadas con la respuesta sensorial meridiana autónoma, más conocida por sus siglas en inglés: ASMR (Autonomous Sensory Meridian Response). Este fenómeno, se volvió furor en Internet desde hace unos años a través de vídeos que brindan sonidos como el murmullo de una voz. Ante este tipo de estímulos, el cerebro emite una respuesta involuntaria que se puede sentir como “un hormigueo a lo largo del cuerpo o en zonas específicas como el cuero cabelludo, en la cabeza en general”. Lo cierto es que la música también es capaz de generarlo, mucho más si se trata de una canción que nos gusta y conmueve: si al oír una canción, tu cuerpo se estremece, es signo de que tu cerebro se encuentra en estado óptimo.
Música en Alzheimer
Según el estudio, llevado adelante por Jeff Anderson (médico y profesor de la Universidad para la Salud de Utah, Estados Unidos), algunos pacientes con Alzheimer tienen la capacidad de identificar una pieza musical en cuestión, como también entender las razones por las cuales le produce escalofríos o los sensibiliza. Al menos durante estos minutos, los pacientes recuperan un fragmento de su memoria.
De acuerdo con estas investigaciones, la práctica de esta disciplina tienen un fabuloso impacto positivo en la salud cerebral y, sobre todo, en la memoria. Todo esto se estima a tal punto que, según los expertos, valdría la pena categorizarlo como una medida preventiva para combatir el Alzheimer. ¡Una razón más para amar la música!