Comer es algo que a todos nos encanta. Nada más agradable que un buen plato de comida que disfrute nuestro paladar, cada bocado es una cuota de gusto que sin duda nadie se puede negar en probar.Cuando se trata de tortas y postres, todo lo que pertenece al ramo de la repostería, ahí sí que nos dan en el punto más débil, todos caemos en la red de un buen dulce o una buena torta. Realmente son deliciosas, a todos absolutamente a todos nos fascinan.¿Pero qué sucede cuando lo que  tantos nos gusta, esos ricos postres que empalagan nuestro paladar, se ven terribles, su aspecto es muy feo? Quizás piensas que se trata de algo sucio o mal hecho y dudas en llevarlo a tu boca. Pues eso es lo que muchos clientes de la repostería de Katherine sienten a diario. Pues bien, ella trabajo por mucho tiempo en un manicomio como enfermera, diariamente lidiaba con pacientes que presentaban diversas patologías y ella con todo su amor y cuidado, en lo posible trataba de hacerlos sentir mejor, sus sentimientos siempre fueron muy nobles y generosos con todos los pacientes.Algo que compartía con esta noble labor, es su don tan particular. Pues ella hace los pasteles más ricos que te puedas comer, tiene una habilidad increíble para hacer obras maestras, parecen reales sus creaciones además de sabrosas y muy bien hechas.

Lo asombroso es el aspecto de cada pastel que ella mágicamente elabora, la inspiración que acompaña a Katherine es su profesión y sus pacientes, de ahí que recrea escenas algo dramáticas y que realmente llegan a incomodar a quien pretende comerlo, pues  nadie desea comerse un dedo o un pedazo de cabeza, es algo muy novedoso en verdad.Algo que disfruta ella con cada uno de sus clientes es observar la reacción que presentan cuando están frente a uno de sus pasteles. Muchos se animan a probarlos y verifican que realmente son estupendos y saben muy bien. Otros por el contrario se alejan del lugar y se atemorizan, pero sin duda, ella ha creado controversia con sus delicias de la repostería.Realmente debemos reconocer la destreza en las manos de esta enfermera
, parecen reales todos sus pasteles,  nos hace sentir en medio de un desastre o frente a un muerto, algo que suena fuerte, pero solo quiere hacer algo distinto y que sea agradable al paladar y este objetivo es el que ha conseguido, ¡que impresionante es su talento!